Los pimientos picantes y los higos dulces como el almíbar son dos de las recetas del éxito de Prada A Tope. También dos ingredientes básicos del activismo que jalona su trayectoria como emprendedor, como persona e incluso como político. A sus 65 años y desde su Palacio de Canedo, rodeado de viñedos maravilloso, nada lleva a pensar que todo comenzó a los 14, cuando tomó el timón de la diminuta zapatería que heredó de su padre en Cacabelos. A pesar de la imagen de cow-boy con sus camisas de cuadros cortadas al ras de los sobacos y las botas camperas repicando, él quizás no sabía que estaba instaurando el nuevo modelo berciano del self-made-man anglosajón.
A los 19 años creó la marca que le ha dado fama en las últimas décadas. Pero su andadura hasta la cima no ha resultado fácil. Como él mismo. Acaso por eso decidió alistarse en la Legión para cumplir con el servicio militar. De regreso a la villa del Cúa revolucionó la vieja zapatería con todo tipo de productos, tanto textiles como agroalimentarios. Y no contento con tan poca faena, optó por dar el salto a la política local. Se convirtió en el primer alcalde democrático de la villa del Cúa por la UCD y también el primero en pasar veinte días en la cárcel por enfrentarse a la autoridad administrativa para defender a unos vecinos frente a la privatización de un camino rural. En 1983 inauguró La Moncloa en Cacabelos con taller de elaboración agroalimentaria, casa de comidas y tienda. En 1997 abrió una primera tienda en el barrio Húmedo de León y un año después adquirió el palacio de Canedo.
¿Quién hubiera dicho hace medio siglo que su aventura se iba a estudiar en las escuelas de negocio? «¡Eso sería la hostia!», contestaría Prada con una de sus habituales coletillas entusiásticas. Pues lo ha logrado. Y mucho más. Inventó el carroviñas».
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Prada recibe el premio nacional de los autónomos por su gran trayectoria
El industrial berciano apuesta por lo «genuino» para salir de la crisis
21/10/2010 p. rodríguez | madrid
- La directora general de Empleo, ayer entregando a Prada el premio nacional de ATA.
raquel p. vieco
- La historia del zapatero prodigioso21/10/2010
Jose Luis Prada, «siempre a tope», -"lo dejó claro varias veces-" recibió ayer en Madrid uno de los premios a profesional del año que entrega la Federación de Autónomos ATA y fue como si pasara un tornado de ideas, empuje y simpatía. Se despachó a gusto, con tacos que en su tono y discurso parecieron imprescindibles, aunque el escenario fuera el Salón de los Tapices del Hotel Meliá Castilla, y levantó una cerrada ovación y a algunos de sus colegas hasta de sus asientos. Y desde el estrado agradeció el galardón al lado de una Maravillas Rojo, secretaria general de Empleo, que entregaba el premio, y que asistía atónita al discurso improvisado y expansivo de Prada.
Además de poder observar en vivo y en directo a Prada a Tope (marca y persona viajan a la vez), en estado puro, los autónomos de toda España, presididos por Lorenzo Amor, celebraron primero su asamblea y, después, entregaron los premios del año, que, además del recibido por el propio empresario berciano, recayeron en Cáritas, BBVA, la Fundación para el Desarrollo de las Tecnologías, la Confederación Valenciana de Comercio y el diario El Economista.
José Luis Prada abrió su intervención con un «¡A tope, ahí!», expresión a la que añadió: «Somos los mejores». Ante un auditorio ya sorprendido, el empresario cacabelense relató que «el otro día, cuando me dijeron que me iban a dar un premio nacional, me sorprendí. Pero fue una sorpresa corta. Y me dije: coño, pues me lo merezco», explicó. Prada también destacó sus 48 años ya como empresario y como autónomo y que él es solo la punta de lanza del negocio.
En el fragor de su discurso, el empresario remarcó la necesidad de aprender continuamente, «aunque seamos los mejores». Y reivindicó lo genuino, la calidad de los productos bercianos y leoneses como fuente y base de riqueza. «Cuando empezamos nadie creía en nosotros, porque parecía que lo bueno solo era lo hecho fuera. Y yo creo en lo genuino como fuente de riqueza. Trabajo en la creencia de que apostando por nuestra región, por el Bierzo y por León saldremos de la crisis, sea global o no», aseguró Prada. Por supuesto, añadió: «Ya está bien de tanta crisis y tanta carallada. Somos la base de la riqueza».
De esta formarecibió el premio de los autónomos a toda una trayectoria con la convicción implícita de que hace falta optimismo. Pero, ante todo, trabajo: «Grano a grano se hace granero y eso se consigue con esfuerzo, si se trabaja y no se queda uno en casa viendo la tele. Nosotros somos los mejores a tope», afirmó ante el auditorio y autoridades presentes, como el alcalde de Ponferrada, Carlos López Riesco. Además exaltó el papel crucial del autónomo.
La historia del zapatero prodigioso
21/10/2010 r. a. | ponferrada
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Publicado por VRedondoF para MinB el 10/21/2010 01:56:00 PM