Bierzo I (vinos sin crianza) Iniciamos con esta cata el repaso periódico a los vinos de la DO Bierzo, otra zona castellano-leonesa que aspira a situarse en los puestos de cabeza del escalafón. Su arma básica es la uva mencía y su presunta aptitud para producir grandes vinos, cualidad ésta que ha despertado en los últimos años el interés de enólogos e inversores ajenos al lugar, que han visto en los vinos bercianos una mina por explotar. Para este primer sorbo hemos elegido los vinos más sencillos: vinos jóvenes y sin crianza en barrica; sobre la mesa 26 vinos (10 blancos, elaborados en su mayor parte con uva godello), dos rosados y 14 tintos, en los que predomina casi absolutamente el 'sello' de la mencía). Solamente hubo tres vinos que despertaran interés en los catadores: Peique Tinto Mencía 2006, de Bodegas Peique, magnífico ejemplo de vino joven, con intensidad frutal -por supuesto-, pero también con finura y con persistencia, Vega Montán 2006, de Bodegas Adriá, con una nariz muy reducida al principio -como otros muchos vinos de la cata-, pero con una frutosidad notable, incluso golosa, y Luna Beberide Mencía 2006, de Bodegas y Viñedos Luna Beberide, cerrado también en nariz, con buenas cualidades y equilibrio global, aunque los catadores echaron de menos una mayor intensidad. Otros tres vinos, Palacio de Canedo Mencía 2006, de Prada a Tope, Vega del Cúa 2006, de Bodegas y Viñedos Bergidenses, y Odorus Godello 2006, de Bodegas y Viñedos Agribergidum, fueron calificados como correctos, sin grandes virtudes ni defectos. El resto fue objeto de serios reproches: 16 de ellos fueron calificados como vinos sin mayor interés y otros dos como francamente defectuosos. Además hubo otros dos vinos que no se pudieron evaluar por problemas de corcho. Aun teniendo en cuenta los precios relativamente bajos de la mayoría de estos vinos, el resultado de la cata hay que considerarlo globalmente como muy decepcionante, siendo exigible que una zona vinícola que aspira a colocar algunos de sus vinos entre los mejores de España, sea también capaz de ofrecer en sus gamas más modestas una calidad mucho más alta que las que los catadores de elmundovino percibieron en esta ocasión. 29 de agosto de 2007 |
Nuestro sistema de puntuación | ||||||||||||||
Los catadores de ElMundoVino.com hacen una valoración global de los vinos según sus aspectos principales (apariencia, aromas, sabores, final, armonía de conjunto) y los valoran de 0 a 20 puntos. Los vinos con serios defectos no alcanzan el mínimo del aprobado, que es 10. Las demás notas significan: | ||||||||||||||
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VINOS CATADOS |
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Bierzo III (tintos 'top' y blancos con barrica) Tercera y última entrega de los vinos del Bierzo por este año. Sobre la mesa un total de 28 vinos (se cataron 29, pero uno de ellos era una muestra de barrica y por lo tanto no se calificó); cuatro blancos con barrica, 23 tintos del segmento alto y uno de más modestas aspiraciones pero que había llegado tarde a la cita. Esta vez los catadores sí se mostraron satisfechos de los vinos que se sometieron a evaluación: 14 de ellos alcanzaron o superaron los 14,0 puntos, listón que define los vinos calificados como 'buenos' y solamente 3 fueron considerados 'poco interesantes'. El lugar de honor correspondió en este caso a Tebaida de Casard e Burbia 2005 (16,0), de Casar de Burbia, que reúne todas las virtudes exigibles a un muy buen vino: complejidad aromática, buena expresión frutal en nariz y boca y un final persistente. Le siguió de cerca un cuarteto compuesto por Pétalos 2006, de Descendientes de J. Palacios, fino, con una gran frutosidad y con un precio bastante ajustado, Gotín del Risc Essence 2005, de Bodega del Abad 2000, con mucha madera en nariz pero con un paso de boca excelente, Carracedo 2005, también de Bodega del Abad 2000, con buenos mimbres sin duda pero (por ahora) sin la redondez y armonía de su 'hermano pequeño', y Tares P.3, de Bodegas Dominio de Tares, también mejor en boca que en nariz, donde domina la madera en exceso. Muy buena impresión causaron también Bembibre 2004, de Dominio de Tares, muy equilibrado y con muchos matices, y Prada a Tope Gran Reserva 1997, de Prada a Tope, la sorpresa de la cata, ya que hoy día es muy poco frecuente encontrar un vino de estilo clásico, pulido -por supuesto-, pero con complejidad y elegancia, aunque haya superado ya su cénit. Aún hubo, además de los citados, otros siete vinos que recibieron parabienes, tal y como exigían sus aspiraciones y su precio. En el grupo de los calificados como 'correctos', el reproche más frecuente fue el exceso de madera, que cuando no va acompañada de un respaldo frutal muy importante suele ser irrecuperable. Como decíamos al principio, no hubo muchos vinos decepcionantes -solamente 3--, pero llama la atención que entre ellos se encuentre el Tebaida de Casar de Burbia 2003, que parece haber digerido mal los calores históricos de 2003, al menos en la botella que se cató. Insólito cara y cruz de las cosechas 2003 y 2005 del mismo vino. 13 de septiembre de 2007 |
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Los catadores de ElMundoVino.com hacen una valoración global de los vinos según sus aspectos principales (apariencia, aromas, sabores, final, armonía de conjunto) y los valoran de 0 a 20 puntos. Los vinos con serios defectos no alcanzan el mínimo del aprobado, que es 10. Las demás notas significan: | ||||||||||||||
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